Infantil de 3 a 6 años

¿Cómo es el desarrollo físico y psicomotor del niño/a de 3 a 5 años?

El desarrollo físico y psicomotor de los niños/as de 3 a 5 años se caracteriza por el perfeccionamiento de las habilidades adquiridas en etapas anteriores. En cuanto a la motricidad fina, el niño/a empieza a garabatear, marcando el inicio del aprendizaje de la escritura. Cada vez es más consciente de su propio cuerpo, de sus movimientos y de la coordinación de éstos.

 A los 3 años, el niño/a ya tiene adquiridas muchas de las capacidades motoras de un adulto: corre, salta, trepa, baila... Sin embargo, los niños/as todavía siguen desarrollando y perfeccionando algunas de las habilidades que habían adquirido en etapas anteriores.

Se va dando un perfeccionamiento progresivo en la motricidad gruesa y se desarrolla de manera especial la motricidad fina. Los niños/as empiezan a ser capaces de hacer trazos y no sólo "rayajos", como hacían hasta los 3 años.

Su conocimiento del mundo empieza a ser estructurado ya que genera esquemas de las situaciones o los personajes más habituales para ellos. Los niños/as tienen un conocimiento más amplío de su entorno.

Su inteligencia también avanza puesto que los esquemas le permiten resolver problemas simples a través del uso de principios o reglas generadas por ellos mismos. Hasta este momento el niño/a aprendía mediante mecanismos de observación y prueba error.

Entre los 3 y 5 años los niños/as empiezan a reconocer las letras, que marcará el inicio del aprendizaje de la escritura. Cada vez es más consciente de su propio cuerpo, de sus movimientos y de la coordinación de éstos.

Desarrollo emocional del niño/a de 3 a 5 años: los sentimientos complejos

El desarrollo emocional de los niños/as de 3 a 5 años se basa, sobre todo, en el conocimiento de sí mismos y de las normas y valores sociales. Desde esta perspectiva, las emociones de los niños/as de esta edad son cada vez más complejas. Asimismo, en la etapa de 3 a 5 años, los niños comienzan a controlar sus emociones. Ya son capaces de ocultar algunos sentimientos a los demás.

El desarrollo emocional de los niños/as de 3 a 5 años se centra especialmente en la capacidad, cada vez mayor, de expresar las emociones y en la comprensión y el control de dichas emociones.

Las más importantes de estas emociones complejas son la vergüenza, el orgullo y la culpa. Para que un niño/a pueda experimentar estas emociones es necesario que conozca normas y valores sociales, que sea capaz de evaluar su propia conducta y que pueda atribuirse a sí mismo el éxito o el fracaso de sus acciones por ajustarse o no a dichas normas y valores.

El mayor dominio del lenguaje que tienen los niños/as de entre 3 y 4 años de edad influye enormemente en el desarrollo emocional. Los niños/as ya son capaces de expresar sentimientos a través del lenguaje. El hecho de nombrar los sentimientos ayuda a conocerlos mejor.

Otra emoción que cobra importancia entre los 3 y los 5 años de edad es el miedo. En estas edades es frecuente que aparezcan el miedo a la oscuridad o a seres imaginarios (como los monstruos). Esto se relaciona con el desarrollo del pensamiento en esta etapa, que permite a los niños/as imaginar, anticipar peligros, etc.