El sector agrario, para llevar a cabo una adecuada modernización, necesita personal cualificado así como un grado de tecnificación adecuado a los tiempos actuales y una renovación generacional en la dirección de las explotaciones agrarias. La agricultura difícilmente superará la crisis estructural que la amenaza sin una revolución en el campo de las nuevas ideas y maneras de producir, añadiendo valor a sus producciones y participando en el proceso de comercialización de sus productos.

Si queremos diversificar el modelo productivo de la Comunidad Valenciana, el agrario es un sector con un crecimiento potencial evidente en nuestro territorio y hace falta dedicarle formación, tecnificación y valor añadido en sus procesos productivos.