Este curso 2020-21 las cosas iban a ser diferentes y, mira por dónde, en la asignatura de Lengua castellana y literatura también lo han acabado siendo pues hemos descubierto y puesto en práctica el ABP, Aprendizaje Basado en Proyectos. Se trata de una estrategia que implementa un conjunto de tareas basadas en la resolución de preguntas o problemas a través de un proceso de investigación o creación por parte de los estudiantes. En nuestro caso Gabriel Girona, nuestro profesor, nos formuló la siguiente pregunta inicial o pregunta-guía: ¿SERÍAS CAPAZ DE SACAR ADELANTE A TU FAMILIA VENDIENDO PALABRAS? Obviamente la mayoría de nuestras respuestas fue un NO rotundo. Luego, analizando el que sería el texto vertebrador de nuestro Proyecto, ‘Un adverbio se le ocurre a cualquiera’ del periodista y escritor Juan José Millás, las respuestas cambiaron por completo.
El funcionamiento en la clase en un contexto tradicional generalmente se basa en la presencia y la recepción de información de una manera unidireccional; es decir, el profesor explica su lección, en un ambiente silencioso y tranquilo. Trabajando con ABP, los estudiantes desarrollan contenido y diseñan. Usando esta metodología, los estudiantes no sólo memorizan la información recopilada, sino que también aprenden haciendo.
Con todo esto, los alumnos de segundo de la ESO B y C tuvimos que dejar volar nuestra imaginación para poder crear una tienda de palabras. Podíamos realizar una maqueta, un póster, un powerpoint, un dibujo… lo que se nos ocurriese para dar vida a nuestra tienda. Esta debía constar de tres secciones; una que vendiese definiciones, otra que vendiese palabras simples, compuestas y derivadas y, por último, una que vendiese familias léxicas y campos semánticos. Las tres secciones tenían que ser visibles en el producto final. También, tuvimos que realizar un Portafolio en el que registramos cada paso dado hasta obtener el producto final y reflejar todo lo explicado y aprendido en clase.
Realmente ha sido una manera efectiva y también lúdica de poner en práctica lo que se nos enseña en clase. Todos hemos aprendido de una forma divertida la teoría al mismo tiempo que hemos fomentado nuestra creatividad al buscar las formas de plasmarla en nuestro proyecto de una forma visible y sencilla. Y tú, ¿Serías capaz de sacar adelante a tu familia vendiendo palabras?
Samara Santamaría, 2°ESO B
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