FRANCISCO TÁRREGA EIXEA (1852-1909)
Nació el 21 de noviembre de 1852 en Vila-real (Castellón). Sus padres se habían desplazado desde Castellón a esta localidad como caseros del convento de clarisas de San Pascual.
De niño una caída a una acequia le dañó la vista. Temiendo que se quedara ciego, sus padres regresan en 1858 a Castellón para que asistiera a clases de música y poder ganarse la vida tocando un instrumento, estudiando con el músico ciego Manuel Gonzalez «el cec de la Marina» quien le inició en la guitarra.
En 1862, tras tocar un concierto en la ciudad, el guitarrista Julián Arcas le aconseja trasladarse a estudiar a Barcelona. Allí pronto abandona los estudios, dedicándose a tocar en diversos cafés, por lo que su padre lo lleva de vuelta a Castellón.
Tras fallecer su padre, en 1874 el empresario Antonio Canesa le costea un viaje a Madrid para estudiar en el conservatorio. Por consejo de Arrieta abandona sus estudios de piano centrándose en la guitarra, consagrándose rápidamente como guitarrista de éxito.
En 1881 inicia una gira por Francia e Inglaterra, antes de regresar a España, donde tras contraer matrimonio se establece en Barcelona, punto de partida de nuevas giras por España y Francia, tocando en 1897 en la prestigiosa Sala Pleyel parisina.
Con la llegada del nuevo siglo, sus problemas de salud se van agudizando, impidiéndole en numerosas ocasiones tocar la guitarra. El 3 de diciembre de 1909, tras un concierto en Picanya (Valencia), se siente mal y decide regresar a Barcelona, donde fallece el 15 de ese mismo mes.
Su cuerpo es trasladado a Castellón en cuyo Cementerio Municipal es enterrado el día 20 entre grandes muestras de dolor y cariño.
Recientemente (y para la mayoría desconocidamente) su fama ha traspasado todas las fronteras mundiales, al convertirse los compases 13, 14 y 15 de su composición Gran Vals en la sintonía de los teléfonos móviles de una conocida marca finlandesa.