Una estudiante de FP grado superior de Educación Infantil del IES El Gabriel Miró ha participado en una movilidad para prácticas de tres meses dentro del programa Erasmus+. Este hecho refleja el compromiso y la implicación que nuestro centro con la internacionalización y los valores fundamentales del programa.
El IES Gabriel Miró ha demostrado su dedicación a la formación profesional y la apertura hacia nuevas experiencias educativas. La estudiante Chloe, cuya pasión por la educación infantil es innegable, se embarcó el pasado mes de marzo en una aventura enriquecedora que le permitió intercambiar conocimientos y adquirir competencias profesionales durante tres meses en otro país europeo, en este caso en Alemania. La experiencia Erasmus+ de nuestra estudiante Chloe ha sido tan satisfactoria, que en breve regresará a su centro de prácticas alemán para trabajar como educadora infantil.
El programa Erasmus+ fomenta la colaboración, la diversidad cultural, la mejora continua en la educación y oportunidades de empleo en un entorno internacional. El IES Gabriel Miró está orgulloso por el hecho de que nuestras estudiantes Erasmus+ representen al instituto, compartan sus experiencias y consigan sus sueños. ¡Enhorabuena Chloe!
Chloe nos comparte este testimonio de su Erasmus en Alemania: «Mis prácticas de técnico superior de Educación Infantil las he realizado en Alemania (Koblenz) en una escuela infantil, en Alemania llamada “Kitas”. La experiencia Erasmus+ me ha ayudado a hacer un cambio de vida muy sano y aventurero.
En la escuela infantil donde realicé mis prácticas, la edad de los niños y niñas era de 1-6 años. Allí las escuelas infantiles tienen la obligación de escolarizar a los pequeños a partir de los 3 años.
Me encargaba de vigilarlos, ayudar y jugar con ellos. No he podido aplicar exactamente lo que he aprendido en mis dos años del ciclo de grado superior de Educación Infantil, pero he aprendido otras muchas cosas. Además, me encargaba de ayudar en el desayuno. En esta escuela los pequeños hacen todo por ellos solos, tienen un bufet libre donde pueden coger los alimentos que ellos deseen comer y las veces que quieran. Es un estilo de educación diferente, muy pocas veces hemos hecho asambleas, los pequeños se pasan el día jugando entre ellos o con los juguetes/juegos educativos que tienen a su disposición.
La escuela se reparte en varias aulas donde pueden jugar de diferentes maneras; un gimnasio, un aula de lectura, de manualidades, de construcción, de juego simbólico… tienen sus propios baños todo a su altura.Tienen en el pasillo sus taquillas, cada niño/a tiene una.
Además, lo más interesante es que todas las edades se juntan, ya que pueden jugar donde quieran. Por lo tanto, he podido estar con todas las edades. Me ha parecido muy interesante que estén todos juntos. En estos 3 meses he ido observando la evolución de los más pequeños y es increíble lo rápido que aprenden, los pequeños aprenden de los mayores.
He de comentar que hay que tener un buen nivel del idioma. Para mi no ha sido tan complicado ya que soy mitad española mitad alemana.
Para mi, la experiencia ha sido muy interesante y gracias a Erasmus he podido conocer mi segundo país, pasar tiempo con mi hermana, gracias a ella he podido hacer este Erasmus y además he conocido (por mis medios, ya que me fui sola) a mucha gente con la que he podido compartir vivencias y disfrutar en viajes.«