Los centros educativos son un espacio clave en el desarrollo personal y emocional de niños, niñas y adolescentes. En este entorno, el profesorado tiene un papel fundamental en la detección y prevención de problemas de salud mental, así como en la creación de un clima de aula saludable y seguro.

Este curso está diseñado para proporcionar al personal docente los conocimientos y herramientas necesarios para:

✔ Identificar señales de alerta en el alumnado.
✔ Prevenir posibles dificultades emocionales y de salud mental.
✔ Actuar de manera adecuada ante situaciones de riesgo.
✔ Coordinarse con otros profesionales y agentes educativos para una intervención efectiva y multidisciplinar.

Con un enfoque práctico y aplicable al día a día en el aula, esta formación es una oportunidad para reforzar la labor educativa y contribuir al bienestar integral del alumnado.