Durante el mes de enero, los niños y niñas de tres años han vuelto de las vacaciones de Navidad con nuevas experiencias y más curiosidad. Han ampliado su juego a través de actividades que fomentan la imaginación, como la creación de historias y roles. Además, se han introducido propuestas que promueven valores como el reciclaje y la reutilización, aprendiendo de manera divertida a cuidar el medio ambiente.