DÍA 1
Desde que en 2017 conocimos de la existencia de esta escuela infantil, casi por casualidad, teníamos pendiente saber qué pasaba dentro de ella. Gracias a Erasmus+ y nuestro proyecto «La mediateca: un espacio para aprender», lo hemos conseguido. Svartlamon barnehage es un proyecto singular en toda Noruega, ya que trabaja siguiendo la filosofía educativa de Reggio Emilia y además cuenta con un centro ReMida dentro de sus instalaciones, que promueve la reutilización de los desechos de las industrias de manera creativa. Así es como el antiguo edificio de un concesionario de coches es, desde 2007, un centro pionero en el país escandinavo. Hoy he estado en clase de los mayores de la escuela, que tienen 5 años, y se ha pasado la mañana volando. Hemos jugado, han desayunado lo que ha preparado la directora, jugado otra vez, hemos bailado y nos hemos revolcado por el suelo, han comido lo que ha preparado la directora también y luego nos hemos ido a saludar y curiosear con Pål Bøyesen, nuestro contacto en ReMida que ha gestionado que podamos visitar la parte de la escuela infantil.
DÍA 2
Hoy hemos estado en la clase de los medianos, hasta los 4 años. El día se basa, como en la clase de los mayores, en el juego libre mayoritariamente. Además, el maestro al comentarle que estaba interesado en los cuentos de tradición oral de Noruega, ha contado una de las historias en las que aparece Askeladden, el protagonista de un buen número de cuentos fantásticos. Hemos comentado como estas historias, al igual que muchas otras, se están adaptando en los mejores casos, o dejando de contar directamente porque, aparentemente, el contenido es inapropiado para la infancia.
Os dejo un par de fotos de la biblioteca de la clase de los mayores, una especie de rincón secreto dentro de aula con una puerta pequeñita para disfrutar de las lecturas. Y siendo el proyecto Erasmus+ de lo que es, no ha faltado la visita a la biblioteca del centro de Trondheim donde, para nuestro sopresa, había disponibles un Wii y varias Play Station 4 para jugar allí. Algunos que conozco, si leyeran esto, lo propondrían para nuestra mediateca. Bromas aparte, al final se trata de convertir las bibliotecas en espacio de confianza atractivos para que personas de todas las edades tengan la oportunidad de socializarse y evolucionar.
DÍA 3
En esta jornada nos hemos ido de excursión al jardín botánico Ringve =D Ha sido un agradable paseo en el que el alumnado, con su chaleco reflectante y sus mochilas, ha puesto a prueba su resistencia caminando, cuesta arriba, los 2 kilómetros que separa la escuela del jardín. Por el camino hemos cogido algunos frutos silvestres y hemos descansado en un parque para reponer fuerzas (se ha quedado con ganas de quedarse más rato para poder juegar). Una vez allí hemos almorzado mientras un par de ardillas se han acercado a que les diésemos de comer. También nos hemos maravillado con las esculturas de madera realizadas por artistas de todo el mundo en troncos de madera secos repartidas por todo el recinto. En la filosofía de esta escuela, el contacto, la observación y el conocimiento de la naturaleza es muy importante en esta escuela por eso, también en su atelier, disponen de elementos naturales.
PD: es real, pero está disecado 😉
DÍA 4
Esta mañana he llegado un poco más tarde porque quería quedarme hasta el final de la jornada y mi sorpresa cuando he llegado es que ¡estaban haciendo yoga! Yogaskolen Trondheim colabora con la escuela y Elin Øvretveit acude desde hace años, una vez por semana, a introducir al alumnado en esta disciplina sin que ellos se den practicamente cuenta. Va contando historias por las que van apareciendo estas posturas y los/las peques la van siguiendo de manera intuitiva, partcipando de manera activa en la narración. Para finalizar hemos hecho unas respiraciones estirados en el suelo que nos han sentado de maravilla. Y es que el cuidado íntegro es relevante en esta escuela, y particularmente el ejercicio físico y todos sus beneficios. Por eso la escuela infantil cuenta con unos espacios exteriores que invitan al movimiento y al descubrimiento de las capacidades físicas.
DÍA 5
Último día de observación que ha empezado como normalmente, preparando las aulas y desayuno para el alumnado. Siempre que vamos de observación, nos ofrecemos a ayudar en lo que consideren y, en la mayoría de los casos, acabamos siendo, salvando las distancias, un miembro más del equipo pues nos asignan tareas y responsabilidades porque, cuando se trata de peques, todas las manos son pocas. Me he despedido de todo el pesonal cuando todo ya rodaba y nos hemos ido a visitar otra escuela infantil, Øya Barnehage, también en Trondheim. Resulta que una auxiliar de Svartlamon, Julia, nos ha puesto en contacto con el que fue el maestro de su hijo en su escuela infantil para que pudiésemos ver otras realidades. Esta otra escuela infantil, según ella, es la más reciente de Trondheim y también trabaja siguiendo el enfoque Reggio Emilia. Allí nos ha recibido Carlos, un maestro almeriense que lleva más de 10 años en Noruega y que, con toda su generosidad, ha estado más de una hora explicándonos el funcionamiento de su centro. Aunque los espacios eran diferentes, se respiraba el mismo ambiente de ofrecer materiales y juego libre para que el alumnado vaya descubriendo con la guía del maestro. En la planta de abajo estaban los peques, de 1 a 3 años, y en la planta de arriba de 4 a 6. Os dejo una panorámica con el edificio de fondo, las estructuras de juego y el invernadero a la derecha.
Vuelta a Elche
Ya estamos de vuelta a casa después de una semana intensa, volviendo a aclimatarnos al calor del Mediterráneo. Ha sido un privilegio poder trabajar codo con codo con el equipo de Svartlamon y comprobar que las similitudes entre las personas que sentimos vocación por trabajar a favor de la infancia, independiente de nuestra nacionalidad y origen. Cuando la persona encargada de la limpieza deja la mopa a un lado para hacerle unas trenzas a una niña que se lo pide, o la directora se pone a hacer el desayuno y la comida para toda la escuela, sientes que no estás en un centro escolar, sino en especie de gran familia. Así lo pude corroborar cuando conversé largo y tendido con un par de padres. Eso es una de las cosas que me encadilaron de Puçol, que aunque todos tenemos unas tareas asignadas oficialmente, no nos tiembla el pulso en ir más allá del deber si el resultado beneficia a nuestro alumnado.
Ahora toca seguir trabajando para continuar aplicando las mejoras que nuestra escuela requiere.