ARREPLEGA D’ESMORZARS TIRATS AL PATI

El colegio inició, durante la semana del 16 al 20 de noviembre, una actividad para concienciar a los alumnos de la necesidad de no tirar el almuerzo.

El colegio inició, durante la semana del 16 al 20 de noviembre, una actividad para concienciar a los alumnos de la necesidad de no tirar el almuerzo.

Día tras día, a la hora del recreo, los maestros nos encontramos almuerzos abandonados en el patio. Podemos encontrar bocadillos, bollería, zumos, batidos… por el suelo, en las papeleras o en los aseos; algunos, incluso,  ni siquiera abiertos.

Pese a que en las aulas, los tutores, recuerdan a los alumnos que no hay que tirar el almuerzo, cada día la escena a la hora del recreo es más o menos la misma.

Por eso desde las clases de 5 años de Educación Infantil se ha llevado a cabo una acción para que los niños del centro sean conscientes de la cantidad de comida que se desperdicia. 

Durante la semana del 16 al 20 de noviembre, desde el lunes hasta el viernes, las clases de 5 años de Educación Infantil han estado recogiendo los almuerzos tirados por el suelo del patio del colegio, depositándolos en una bandeja. El viernes, han ido pasando por las clases de Educación Primaria para enseñar a los "mayores" cuanta comida se desperdicia y, a partir de ahí, iniciar uina reflexión en los niños, valorando esta realidad. Han sido muchas las caras de sorpresa y asombro al ver la bandeja llena de almuerzos.

Esta experiencia nos ha ayudado a que tanto los pequeños como los más mayores del centro tomen conciencia de la cantidad de comida que se desperdicia y lo que esto conlleva. La actividad se ha iniciado en Educación Infantil, pero ahora son los "mayores" de primaria los que tienen en sus manos la solución para que esto no se vuelva a repetir.

Hemos de ser concientes que detrás de cada almuerzo está el trabajo y el esfuerzo de las familias para poder obtener los alimentos con lo que dar de comer a sus hijos. Pero no sólo eso, las familias también invierten tiempo y cariño en preparar el almuerzo diario.

Si fuera poco, hemos de ser conscientes que el simple hecho de poder contar con un almuerzo diario nos hace privilegiados frente a otros niños que poco o nada tienen para comer. 

Según El Programa Mundial de Alimentos (PMA), que es la organización de ayuda humanitaria más grande del mundo que lucha contra el hambre en todo el planeta, "alrededor de 795​ millones de personas en el mundo no tienen suficientes alimentos para llevar una vida saludable y activa. Eso es casi uno de cada nueve personas en la tierra" que sufre hambre o desnutrición.

Lo que queremos hacer ver a los alumnos con esta experiencia es que cuando tiramos el almuerzo no se está dando importancia ni al esfuerzo, ni al tiempo que las familias emplean diariamente. Además, no se valora la comida, a la que tratamos como si fuera basura.

Por eso, a través de un cartel elaborado por la maestra de Religión y algunos de sus alumnos, decimos: "Hay mucha hambre en el mundo, ¿por qué tiras tu bocadillo? ¡No lo tires!".

Las clases de Educación Infantil van a volver a repetir la recogida de almuerzos en el patio, esperando que el número de almuerzos tirados vaya disminuyendo.

También, a raíz de esta idea, están naciendo otras propuestas en Educación Primaria.

"Piensa antes de tirar la comida"

 

 

 

 

 

 

Avís de privacitat: Ús de cookies pròpies per a anàlisis de visites

Este lloc web utilitza cookies pròpies amb l'únic propòsit d'analitzar el trànsit i millorar l'experiència de l'usuari. Les cookies són xicotets arxius de text que s'emmagatzemen en el teu dispositiu quan visites el nostre lloc. No compartim esta informació amb tercers ni la utilitzem per a fins publicitaris.

Veure política de cookies