Soy Elena Mejino Julián de 1ºBach y hoy, vengo a recomendaros una novela de Alice Kellen, autora nacida en Valencia, titulada Todo lo que nunca fuimos, publicada en 2019 en la editorial Planeta. Esta novela, es la primera parte de la bilogía Deja que ocurra y consta de 346 páginas.
Todo lo que nunca fuimos es una novela romántica que narra la historia de Axel y Leah, dos vecinos y casi familia que se conocen de toda la vida. Él es diez años mayor que ella y amigo de Oliver, el hermano de Leah.
A Leah le apasionan Los Beatles y pintar. A Axel el surf y estar solo.
Sus familias, que viven en Byron Bay (Australia), siempre han estado muy unidas, de hecho, Leah siempre ha estado muy enamorada de Axel, sin embargo, él nunca la ha llegado a ver de esa forma, pero los padres de Leah mueren en un accidente y, entonces, ella se encierra en si misma, dejando de sentir y de pintar. Ante esa situación, Oliver, se verá obligado a irse a trabajar a Sídney, dejándola en casa de Axel, quien intentará ayudarla a encontrar y unir los pedazos de la chica llena de color que un día fue.
Esta historia donde predominan el mar, los colores y las canciones de Los Beatles, te atrapará desde el minuto uno, conmigo lo hizo, porque a pesar de ser un cliché y bastante predecible, tiene algo que engancha. De hecho, es uno de los motivos por el cual, decidí hacer la reseña sobre esta novela. Otro, es por lo increíble que es la descripción de la autora sobre Australia, es como si te transportases allí y pudieses perfectamente saber cómo es, sin ni siquiera haber estado. Además, la evolución y complejidad de los protagonistas está muy bien narrado, lo cual, te ayuda a comprender cómo son y por qué toman las decisiones que toman.
Después de leerlo, es como si hubiese vivido en Australia y hubiese sentido su mar, su calidez, porque al final, este libro trata de sentir y hacerte sentir, ya bien sea compartiendo la burbuja en la que viven o con las canciones que envuelven cada momento, haciéndolos más íntimos, más especiales, más suyos, más nuestros. Y es que en este libro nada pasa desapercibido, todo tiene su importancia y significado.
Por último, me gustaría citar algunos diálogos o momentos que más me han gustado:
‘’A veces esperas cosas de la vida que no llegan. Quizá la culpa sea nuestra por planificar demasiado, ir mancando rutas que después uno nunca llega a recorrer. Y supongo que eso genera decepciones.’’
‘’ Solo pude pensar que el amor sabía a fresa, tenía diecinueve años y la mirada del color del mar.’’
Así que, no olvides adentrarte en Todo lo que nunca fuimos, si quieres saber porque a veces basta un ‘’deja que ocurra’’ para tenerlo todo.