MANIFIESTO 8 DE MARZO 2022
IES LA TORRETA ELDA
El Día internacional de la Mujer, es el día en el que millones de mujeres alzamos la voz en todo el mundo para REIVINDICAR nuestros derechos y luchar contra todas las discriminaciones por razón de sexo. Queremos que este día sea, por un lado, un homenaje para todas aquellas mujeres que han luchado y luchan día a día por alcanzar una realidad en la que todas las personas gocemos de los mismos derechos y oportunidades, y formemos parte de una sociedad justa y equitativa.
Y, por otro lado, a pesar de que La Declaración Universal de los Derechos Humanos defiende la igualdad entre hombres y mujeres, y pese a los logros obtenidos, sigamos trabajando y siendo conscientes de que en esta lucha aún queda mucho camino por recorrer.
La aportación de las mujeres a lo largo de la historia en todos los ámbitos es incuestionable a la par que invisible, y lo que queremos manifestar en esta fecha es nuestro convencimiento en que las cosas pueden y deben cambiar.
Estos últimos cursos han venido marcados por una complicada situación a nivel global generada por la pandemia y la emergencia sanitaria. Es necesario poner de manifiesto en este 8 de marzo que, aunque esta situación está siendo dura para toda la sociedad, está afectando especialmente a las mujeres.
En nuestros hogares sigue habiendo desequilibrio en el reparto de tareas, ya que las mujeres son las que mayoritariamente siguen asumiendo las tareas de casa, las del cuidado de hijas e hijos y las de familiares dependientes. También en oficios esenciales para el mantenimiento de la vida.
Las tareas en el hogar que realizan los varones son consideradas como “ayudas”, no como una responsabilidad necesariamente compartida.
Las mujeres realizamos el 31% del trabajo remunerado en el mundo y el 80% del que no supone salario alguno.
La segregación laboral mantiene a las mujeres en los trabajos peor remunerados
En el actual escenario, vuelve a hacerse patente la feminización mundial de la pobreza, no solo por la mayor exposición al riesgo de las mujeres debido al rol de cuidadoras, sino también por la mayor vulnerabilidad en situaciones de “violencia de género“.
Las múltiples violencias a las mujeres, también estructurales y simbólicas necesitan de la conciencia de todas y todos de que estas son un problema público estructural.
Los datos siguen siendo evidencia de la desigualdad entre hombres y mujeres a pesar de que seamos el 50% de la población mundial.
Según Naciones Unidas las mujeres no llegamos ni a un 25% de personas en los parlamentos del mundo. No estamos en los órganos de decisión suficientemente representadas.
La presencia de las mujeres en los medios de comunicación, televisión, radio, prensa es de un 24% en todo el mundo.
Solo el 17% de los Tribunales internacionales están integrados por mujeres. Y en los tribunales regionales solo el 25% don magistradas.
Solo somos el 6% de las personas directoras de las grandes empresas.
La brecha salarial en el deporte, la casi ausencia de premios internacionales de arte, producción científica, tecnológica, etc otorgados a las mujeres sigue siendo escandalosa.
Todavía escuchamos expresiones machistas dirigidas a las mujeres en diferentes contextos y situaciones, expresiones que son irrespetuosas e invasivas y que atentan contra la dignidad.
Otros datos nos siguen hablando de lo difícil que es ser mujer en el mundo actual.
Violencia sexual, matrimonio infantil, embarazos en adolescentes, mutilación genital, mujeres víctimas del sistema prostitucional, la explotación reproductiva, el abandono escolar de las chicas en zonas de conflicto que es 2,5 veces mayor que el de los chicos,etc. Cada año 70 millones de mujeres son privadas de educación básica, y 60 millones de niñas sufren abusos sexuales de camino al colegio.
Estos solo son algunos datos que muestran la cruda realidad de las mujeres de todo el mundo.
Desde nuestro instituto La Torreta hemos dado un paso al frente como comunidad educativa.
Profesorado, alumnado y familias estamos involucra@s en el proyecto COEDUCACENTRES poniendo en marcha ideas, acciones, reflexiones, programas educativos, etc, en materia de igualdad desde la responsabilidad ciudadana, ética y profesional, con el propósito de construir un mundo más justo para las mujeres.
Es necesario seguir trabajando en el seno de la familia para que los niños y niñas crezcan en una sociedad igualitaria, por ello es fundamental la implicación de la comunidad educativa y fomentar la formación de los y las profesionales de la educación en materia de igualdad y prevención de la violencia entre los más jóvenes.
Un curso más volvemos a aunar esfuerzos y conmemoramos el Día internacional de las mujeres con energía y empeño. Hacemos un llamamiento a nuestra juventud y a todas las generaciones para promover la igualdad los 365 días del año, para que deje de ser un espejismo y, en un futuro próximo, la igualdad entre mujeres y hombres sea una realidad. Lograrlo está en nuestras manos, es una cuestión de ciudadanía, de educación, de democracia y de justicia social.