Una de las principales necesidades de cualquier empresa es disponer de una plantilla cualificada, especialmente en sectores que requieren un alto nivel de desarrollo tecnológico. A comienzos del siglo XX, la escasa tradición industrial en la zona llevó a la empresa a tomar la iniciativa en la formación de su personal. Por ello, desde sus orígenes, la Compañía Minera de Sierra Menera (C.M.S.M.) decidió crear un espacio destinado a la capacitación y selección de trabajadores.
En enero de 1912 se inauguró en la Alameda una escuela de primera enseñanza dirigida a niños. Más adelante, en 1921, el edificio fue adaptado para albergar la Escuela de Artes y Oficios, orientada a formar a los jóvenes que se incorporarían a la Compañía Siderúrgica del Mediterráneo (C.S.M.).
En sus inicios, los aprendices trabajaban en la fábrica durante el día y posteriormente acudían a la escuela para recibir formación teórica sobre su oficio. Con el tiempo, se instalaron máquinas en el centro educativo, lo que permitió la apertura de talleres de aprendizaje.
En 1942, bajo la gestión de Altos Hornos de Vizcaya (A.H.V.) y en cumplimiento de la normativa que obligaba a las empresas con más de cien trabajadores a ofrecer formación profesional, se modernizó la escuela. Fue entonces cuando pasó a llamarse Escuela de Aprendices A.H.V.
En 1962, A.H.V. – F.S. (Factoría de Sagunto) presentó una solicitud al Ministerio de Educación, firmada por su director (Jerónimo Roure), al objeto de obtener la clasificación de “Centro reconocido de formación profesional e industrial” para su Escuela de Aprendices. En 1965, al reconocer a la Escuela de Aprendices de AHV como “Centro no oficial Reconocido de Formación Profesional Industrial”, A.H.V. decidió construir un nuevo centro formativo.
En 1966 se inauguró la nueva sede, ubicada en el cruce entre la Avenida de la Hispanidad y la calle Periodista Azzati, cerca del sanatorio y en dirección a Canet d’en Berenguer. Este nuevo centro se denominó Centro de Formación Profesional Eduardo Merello, hoy conocido como Centro Integrado Público de Formación Profesional.
El centro lleva el nombre de Eduardo Merello Llasera, ingeniero de minas y gerente que más tiempo estuvo al frente de Altos Hornos de Vizcaya. Fue él quien impulsó el proyecto de la nueva Escuela de Aprendices. En el Puerto de Sagunto, su figura es ampliamente recordada por la importante labor social que desempeñó durante las décadas de 1940 y 1950, promoviendo mejoras significativas para la comunidad, como la pavimentación de calles, la creación de jardines entre los chalets de la Gerencia y la siderurgia, así como la construcción de escuelas y del sanatorio. Su visión también dejó una huella profunda en el desarrollo urbanístico de la época, destacándose por su preocupación en alejar a la población de los humos industriales mediante zonas verdes y amplias avenidas, como la actual Camp de Morvedre.
Con el paso del tiempo, la responsabilidad formativa pasó de A.H.V. a manos de A.H.M. (Altos Hornos del Mediterráneo), que continuó con la labor de formar trabajadores cualificados, tanto para la propia empresa como para otros sectores, consolidando así el prestigio del centro.
La integración en la Comunidad Económica Europea (C.E.E.) exigió la transferencia de competencias educativas a las administraciones públicas. Como resultado, en 1988 se firmó un convenio entre la Consellería de Cultura, Educación y Ciencia de la Generalitat Valenciana, A.H.M. y SIDMED (Siderúrgica del Mediterráneo, S.A.) que permitió la incorporación del centro a la red pública de educación.
En 1989, el centro adoptó el nombre de Instituto de Formación Profesional Eduardo Merello, y se le autorizó a impartir Educación Secundaria Obligatoria (E.S.O.) y Bachillerato. Sin embargo, no fue hasta el curso 1994/95 cuando comenzaron a impartirse de forma anticipada las enseñanzas de 3º de ESO, y la sustitución progresiva de parte de los programas de Formación Profesional. En 1997, mediante una orden de la Conselleria de Cultura i Educació, el centro pasó a llamarse Instituto de Educación Secundaria Eduardo Merello.
Finalmente, en 2023, tras años de demandas, se constituyó oficialmente el Centro Integrado Público de Formación Profesional Eduardo Merello, dedicado exclusivamente a la enseñanza de Ciclos Formativos. El alumnado de ESO y Bachillerato fue trasladado al nuevo Instituto de Educación Secundaria nº 5.
Este centro ha desempeñado un papel clave en el desarrollo social de la comunidad local y su entorno. A lo largo de su extensa trayectoria, ha formado a generaciones de ciudadanos, contribuyendo a una cultura técnico-profesional sólida. Ha preparado a sus estudiantes para desempeñarse como Oficiales y Maestros Industriales, Técnicos Medios y Superiores, y también como futuros Ingenieros y Arquitectos.
La alta cualificación del alumnado de este centro ha quedado reflejada en su destacada participación en certámenes, concursos, ferias y exposiciones, donde han sido galardonados en múltiples ocasiones con premios, trofeos, diplomas y reconocimientos, alcanzando frecuentemente los primeros puestos.
A pesar de los distintos nombres que ha recibido a lo largo de su historia, el C.I.P.F.P. Eduardo Merello sigue siendo conocido como LA ESCUELA DE APRENDICES.
Fuentes de información
- El Puerto: crónica de un siglo 1902-2002. Antonio Ortiz y José María Prats.
- Historia de la exposición del centenario del grupo escolar Sota y Aznar, edificio de la escuela de aprendices. Asociación de Amigos de la Escuela de Aprendices.
- La siderurgia de Sagunto (1940 – 1958). Ana María Quílez Pardo. PUV Publicacions.
- APIPS. Patrimonio Industrial de Puerto de Sagunto.