Fui invitado a la Nit de Contes. Voy a tratar de resumir algunas impresiones, pero os aseguro que hay muchas más y muy positivas.La Nit de Contes es un paseo maravilloso de la mano de los cuentos, que organiza un grupo de maestros y maestras nutrido, con energía y muy imaginativo en el CEIP Cristòfol Colom de Xixona cada dos años para su alumnado.
Estos maestros, además, cuentan con la ayuda de compañeros, compañeras y alumnado que pasaron por el centro y que siguen involucrados en un proyecto que enamora. También colaboran madres, padres y hasta la bibliotecaria municipal. La Nit de Contes consigue que el alumnado de 3º y 4º disfrute de una noche de cuentacuentos, teatro, títeres y espectáculos visuales en su centro, en el que finalizarán la noche durmiendo y desayunando todos juntos. El hilo conductor, en esta ocasión, es un cuento del escritor Jaume Miquel Peidró, antiguo maestro del centro pero todavía implicado en el proyecto. El cuento se publicará próximamente.
Horas antes del comienzo, el equipo organizador comienza a dar los últimos detalles a los ambientes y escenarios para, posteriormente, pasar a caracterizarse. Son muchos los personajes que dan vida a esta noche y muchos los meses que han invertido en el proyecto. A las 21:30 se invita a los padres y madres a dar un paseo por los diferentes escenarios para que, una vez hayan salido del centro, dar paso a los verdaderos protagonistas, los niños y niñas del Cristòfol Colom.
Es difícil que la fotografía y los vídeos consigan transmitir el ambiente mágico que se respira cuando comienza la noche y la ilusión con el que las niñas y niños lo viven. También es difícil explicar todo lo que pasa, pero os puedo hablar de tirolinas por las que descienden personajes, pasadizos oscuros, un lago con personajes dentro de una barca que ven cómo el agua a su alrededor cambia de color, surgen cientos de burbujas o la caña se hunde en el agua empujada por un ser muy especial, canciones que el propio alumnado protagonista interpreta y canta, proyecciones en el techo que deben visualizar acostados, cementerios con personajes terroríficos, sombras chinas en un lienzo enorme, y un largo etcétera.
A las 2:00 de la madrugada acaban el recorrido y se preparan para dormir en sus sacos. Cuando por la mañana, su familia les recoja, el alumnado se llevará de vuelta a casa muchas emociones, la sensación del poder de la palabra como medio de transmisión, y un recuerdo imborrable para toda su vida.
Me gustaría acabar agradeciendo la amabilidad de su directora Marina Ferrándiz y, en especial, la atención que me dispensó Damiá Llorens, maestro de música y otro de los impulsores de la idea. Una idea que trajo hace ya algunos años Maribel Correcher en su incorporación al centro y que, vericuetos de la vida, no llegó a materializarse en el centro del que procedía. Sara Raya se ha encargado de la coordinación del seminario que ha reflexionado y debatido la forma de llevar a la práctica este proyecto educativo. Y, como he dicho antes, muchas más personas de la comunidad educativa han trabajado para que fuera posible. Las buenas ideas hay que materializarlas, como ha hecho este equipo. Gracias y enhorabuena.