CONTRAINDICACIONES DEL MASAJE ESTÉTICO

CONTRAINDICACIONES DEL MASAJE

Si es importante conocer los beneficios que se obtienen con un masaje, no es menos importante conocer las situaciones en las que no sólo no es beneficioso sino que puede ser perjudicial para los clientes. 

Las contraindicaciones del masaje pueden ser absolutas o relativas y son de obligado conocimiento, para no perjudicar a la persona que reciba el masaje.

Veamos a qué nos referimos cuando hablamos de contraindicaciones absolutas y relativas:

• Las contraindicaciones absolutas del masaje son situaciones en las que definitivamente no se debe hacer un masaje.
• Las contraindicaciones relativas del masaje son situaciones en que el masaje se puede practicar bajo ciertas indicaciones, para no causar en el paciente algún daño colateral.

CUADRO GENERAL DE CONTRAINDICACIONES:

ABSOLUTAS:

• Infecciones generales y estados febriles (nunca haremos masaje cuando un cliente tenga fiebre!).
• Enfermedades infecciosas de la piel (virales o bacterianas).
• Inflamaciones agudas.
• Cuando en la zona a tratar hay presencia de venas varicosas (casos avanzados).
• Alteraciones circulatorias (flebitis, linfangitis, trombosis, embolias arteriales y arteriosclerosis).
• Pérdida de la sensibilidad en una zona (consultar al médico).
• Piel alterada: (úlceras, quemaduras, heridas abiertas, …). Nunca sobre esta zona.
• Cardiopatías en general (taquicardias e hipertensión arterial).
• Brotes reumáticos agudos.
• Alteraciones hemorrágicas.
• Neoplasias: Enfermedades tumorales y cancerosas.
• Traumatismos con herida abierta, fracturas y fisuras.
• Primeros 3 meses de embarazo. 
• Después de una cirugía.
• Cuando se padece de problemas renales (preguntar al médico antes).
• En cualquier otra circunstancia en la que dudemos si es adecuado o no hacer masaje, siempre consultar al médico.

RELATIVAS:

• Alteraciones de la piel (eczema, psoriasis, verrugas, etc.).
• Alergia e hipersensibilidad cutánea.
• En caso de quemaduras leves, se puede omitir la zona afectada.
• Hipertensión, hipotensión y taquicardias (en casos muy leves). Se dará masaje solo si el cliente se encuentra bien. 
• Embarazo (+ de 3 meses). Con prescripción médica, solo se le aplica el masaje en posición sentada o decúbito lateral, con técnicas suaves y evitando zona del vientre y zonas de reflejo (pies).
• En la zona abdominal si existe diarreas, hernias o cólicos agudos.
• Períodos digestivos (no trabajar zona del abdomen).
• Durante la menstruación, si es dolorosa, evitar zona del abdomen.
• Insuficiencia hepática (consultar con el médico).
• Enfermedades reumáticas (consultar con el médico).
• Hernia discal (no en la zona si está dolorida, zonas cercanas, masaje suave).
• Se desaconseja en caso de hiperfunción de la glándula tiroides (consultar al médico).
• Calcificación de tejidos blandos (no en la zona).
• Osteoporosis activa (consultar médico).
• Úlceras gástricas (no trabajar abdomen).
• A pacientes con venas varicosas, en casos leves, sólo se les debe aplicar un masaje de presión suave.

A continuación, veremos con más detalladamente, el motivo por el cual no se puede aplicar el masaje en algunos de los casos enumerados en el cuadro de contraindicaciones.

• Infecciones generales y estados febriles. Si un paciente presenta fiebre, el masaje, por el mecanismo de fricción de aumento del riego sanguíneo, va a incrementar todavía más esa temperatura por lo que aplicaremos el masaje cuando haya remitido ese proceso infeccioso.
• Problemas cutáneos. Se contraindica el masaje de forma absoluta, cualquier proceso infeccioso cutáneo (bacteriano o vírico). Además, tampoco haremos masaje sobre zonas con úlceras, quemaduras, eczemas, psoriasis, verrugas, heridas abiertas, zonas con hipersensibilidad. Si la piel presenta alergias, buscaremos un cosmético que no genere reacción alérgica.
• Inflamación aguda (calor, rubor, edema y dolor). Habitualmente cuando un tejido sufre una lesión, ya sea traumática o no, el organismo responde inflamándose, que le sirve para mantenerla inmóvil y no agravar la lesión todavía más. En estos casos se debe reducir la inflamación (inmovilidad, frío local, elevación del miembro afectado) y solo después será indicado el masaje.
• Flebitis aguda y tromboflebitis. La flebitis puede llevar consigo la formación de un coágulo de sangre (trombo) que podíamos desprender si aplicamos masaje (tromboflebitis) pudiéndose impactar este trombo en cualquier parte del torrente circulatorio (trombosis), afección que puede ser letal dependiendo del órgano afectado.
• Brotes reumáticos agudos: en general, no se recomienda el masaje durante los brotes reumáticos debido a que puede empeorar la inflamación y el dolor en las articulaciones afectadas.
• Osteoporosis activa: El masaje puede aumentar el riesgo de fracturas óseas en personas con osteoporosis activa, ya que puede ejercer presión sobre los huesos y causar daño.
• Hernia discal: El masaje está contraindicado en el caso de hernia discal debido a que puede ejercer presión sobre la zona afectada y empeorar la condición. 
• Neoplasia. En un paciente con cáncer, las células cancerosas tienen aumentado su metabolismo de crecimiento y división celular. Si aplicamos masaje aumentamos el riego sanguíneo sobre esa zona llevando más oxígeno y nutrientes, por lo que el tumor podría crecer con mayor rapidez.
• Alteraciones hemorrágicas: El masaje puede ejercer presión sobre los vasos sanguíneos y causar daño, lo que puede aumentar el riesgo de hemorragias en personas con alteraciones hemorrágicas. Sobre todo estarían contraindicadas las maniobras con mucha presión y las percusiones.
• Úlceras gástricas: Las úlceras gástricas son lesiones en la mucosa del estómago que pueden ser causadas por una variedad de factores, como el estrés, el consumo excesivo de alcohol, el uso prolongado de antiinflamatorios no esteroideos (AINE), entre otros. El masaje puede ejercer presión sobre el abdomen y causar dolor en personas con úlceras gástricas, lo que puede empeorar la condición.
• Menstruación: Si fuese muy dolorosa estaría contraindicado el masaje en estos días si el masaje es en la zona del abdomen. 
• Embarazo: Los 3 primeros meses de embarazo, se desaconseja dar masaje a la embarazada, por precaución. Después del tercer mes, no podremos trabajar el masaje en la zona del abdomen. Para resto de zonas (piernas, espalda, …) lo más prudente es consultar al médico o, en su defecto, hacer firmar a la clienta un consentimiento informado. 
• Calcificación de tejidos blandos: El masaje puede aumentar la presión sobre los tejidos blandos calcificados y causar dolor en la zona.
• Fracturas y fisuras óseas.
• También, como norma general, el masaje está contraindicado en cualquier situación en la que el cliente/paciente presente dolor intenso.
• Por último, el masaje está contraindicado siempre que el técnico superior tenga dudas en el diagnóstico de la patología real de su cliente/paciente o desconozca la anatomía de la región sobre la que se va a trabajar.