Una foto con los compañeros de Grenoble con los que Christian y Andrea han convivido durante un mes resume esta magnífica experiencia y confirma a este intercambio como un proyecto a continuar en próximos cursos. Rodeados por sus compañeros basta mirar la felicidad que expresan para darse cuenta de que les echarán de menos y de que su esfuerzo y su constancia han valido la pena. Dentro de unos días serán sus corresponsales quienes estén en nuestro instituto asistiendo a clase con ellos, con sus compañeros y conociendo otro sistema educativo.