
La etapa escolar de un niño representa una época de la vida idónea para practicar y aprender música. Las edades comprendidas entre los 0 y 12 años permiten aprender música con fluidez gracias a la flexibilidad del seso.
Entre los beneficios de aprender y/o practicar música destacamos los siguientes:
– Desarrolla la creatividad del alumnado.
– Fomenta la sociabilització del ser humano.
– Permite mejorar la coordinación oculo-manual gracias a la práctica de un instrumento musical.
– Descubre nuevas sensaciones musicales a través de su propio cuerpo utilizando la voz como un instrumento y la percusión corporal.
– Permitirá conocer la higiene postural en la hora de tocar un instrumento musical.
– Controlará de manera progresiva la respiración en uso de la práctica instrumental.
– Reduce los niveles de ansiedad.
