Desde el comedor y con el objetivo de reducir el ruido ambiental en el momento de la comida hemos creado el “día del silencio”. Los viernes comemos en voz baja, hablando en susurros, valorando la importancia del silencio y a la vez obteniendo recompensas al buen comportamiento (tarjetas de recompensa, helados...). Cuando consigues 5 tienes premio! 🥇